Industria electrónica en Asia / Barómetro sectorial
Este primer Panorama sectorial 2014 está dedicado a nuestro barómetro sectorial global, que evalúa el riesgo de crédito de los sectores económicos clave en tres de las principales regiones del mundo.
BARÓMETRO SECTORIAL
América del Norte sigue en marcha, con empresas que demuestran mejoras en sus resultados constantemente. Su confirmada fortaleza financiera estabiliza los riesgos sectoriales en niveles relativamente cómodos. En Europa occidental, el retorno al crecimiento económico aunque gradual, es real. Sin hacer ningún cambio importante, tomamos nota de que los riesgos sectoriales tienden a estabilizarse, en particular en los países más afectados por la última recesión. Por último, Asia emergente es ahora un motivo de preocupación. La desaceleración económica en China revela dificultades estructurales que afectan la rentabilidad de las empresas. Sectores que sufren de exceso de capacidad deben inevitablemente reestructurarse y este proceso lleva consigo riesgos mayores. La evaluación del riesgo de la industria de los metales, que personifica cada posible exceso, se ha deteriorado en este entorno.
industria electrónica en Asia: Innovación, motor de crecimiento y generador de riesgos
Luego, se propone un enfoque en la industria electrónica en Asia emergente, una región que se ha convertido en cuestión de años, en el taller del mundo para muchos componentes electrónicos. Como hizo Japón anteriormente, los países emergentes de Asia se han posicionado como actores clave del sector. Sin embargo, el modelo tiene sus límites, y el riesgo de crédito ahora tiende a aumentar, como lo confirma la encuesta Coface de las empresas chinas: los jugadores asiáticos medianos dependen excesivamente de las grandes empresas extranjeras. Sus márgenes se están reduciendo y tienen que invertir cada vez más para mantenerse al día con los rápidos cambios. Es el caso de China continental, pero también en menor medida el caso de Taiwán y Hong Kong. Las empresas asiáticas en el sector simbolizan el éxito de las economías emergentes y ascienden inevitablemente en la cadena de valor. Pero, ¿tienen lo que se necesita para limitar el aumento de los riesgos asociados?
