Noticias y Publicaciones
10/04/2018
Publicaciones económicas

La singularidad del riesgo político en Europa Central y Oriental

La singularidad del riesgo político en Europa Central y Oriental

En el marco de la actual ola de elecciones en la región de Europa Central y Oriental, los países de la CEE experimentan un período de transición clave, en un contexto de riesgo político y aceleración económica, que parecen ser ahora los dos conflictos cruciales de la región. La tasa media de crecimiento del PIB de la región ascendió a 4,5% en 2017, su nivel más alto desde 2010. No obstante, la política local y los cambios en el sistema jurídico nacional están creando problemas para la región. El deterioro de las relaciones con la Unión Europea (EU) y la amenaza de sanciones para Polonia son una fuente adicional de preocupación.

Aunque el riesgo social ha aumentado en la última década – especialmente en Hungría, según los resultados del modelo de riesgo de Coface -, la región de Europa Central y Oriental presenta muchos menos riesgos que otros mercados regionales emergentes. No obstante, los indicadores publicados por organismos internacionales que controlan la independencia y la libertad civil en el sistema político revelan un deterioro de las evaluaciones, con Polonia sumándose a Hungría como motivo de preocupación. Aunque los países de Europa Central y Oriental han llevado a cabo enormes progresos en materia de corrupción, ésta aún persiste: Bulgaria, Hungría y Rumania se ubican entre los últimos países europeos en el índice de corrupción de Transparencia Internacional. A pesar de las numerosas ventajas que supone para las economías de Europa Central y Oriental formar parte de la UE, estas son cada vez más “euroescépticas”: de acuerdo con los últimos resultados del barómetro, República Checa es el tercer país más “euroescéptico” de la UE, a pesar de su integración en las cadenas de suministro de Europa Occidental y de sus fuertes lazos comerciales con la Unión Europea.

Los datos concretos señalan que estas cuestiones políticas aún no han impactado negativamente sobre las economías y empresas de Europa Central y Oriental. Las reducciones fiscales sostienen a los hogares, y en algunos casos, también a las empresas, como es el caso de Hungría, donde el impuesto a las ganancias alcanzó la tasa más baja de Europa. Las encuestas de opinión demuestran una probabilidad de que los partidos gobernantes en Hungría y Polonia extiendan sus mandatos. Ciertamente, las controversiales modificaciones al sistema legal han disparado el descontento social y en varios países se han llevado a cabo manifestaciones, pero las empresas, incluidas las entidades extranjeras, aún no han abandonado la región de Europa Central y Oriental. Los flujos de inversión extranjera son positivos y un gran número de grandes inversiones se lleva a cabo en la región, lo que parece demostrar que las ventajas de competitividad en materia de calidad y precio, la proximidad geográfica con Europa Occidental y la sólida expansión económica prevalece sobre los problemas políticos. Un futuro deterioro potencial en términos de riesgo político, especialmente si les afecta directamente, podría disuadir a las empresas extranjeras de permanecer en los países de Europa Central y Oriental. Si se implementase la idea de vincular la financiación de la Unión Europea con el estado de derecho, las economías no colapsarían, pero ciertas empresas se verían perjudicadas. Debido a la significativa cooperación con el sector público utilizando la cofinanciación de la UE, la construcción y las TIC serían los primeros sectores afectados, repercutiendo el deterioro en sus sectores asociados. En última instancia, el escenario más razonable sería la consecución de un compromiso de estas relaciones en conflicto.

 

Descargar la publicación
FOCUS  CEE POLITICAL Portada

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Descargar esta publicación : La singularidad del riesgo político en Europa Central y Oriental (679,99 kB)
Parte superior